Querido Dios, gracias por este día. Te doy las gracias por permitirme experimentar este momento mágico en mi vida.
Gracias por mi familia, mis amigos, mis seres queridos y vecinos. Gracias por mi salud. Gracias por todas las funciones de mi cuerpo que se realizan a la perfección. Gracias por mi casa y todo lo que contiene. Gracias por todos mis bienes. Por cada aspecto de mi vida… Gracias.
Aprecio todo lo soy en el día de hoy. Incluso te doy las gracias por el sol, por la mañana, por los pájaros cantando y las flores que florecen. ¡Gracias por toda la belleza que me rodea en este momento! Gracias por la abundancia que recibo y recibiré multiplicada.
Gracias por todas las bendiciones. Gracias por cada sonrisa que veré hoy. Gracias por las oportunidades que se despliegan ante mí. Elijo irradiar gratitud hacia todos y hacia todo lo que contacte hoy. ¡Mi corazón está repleto con reconocimiento y acción de gracias!
Dios mío: ¡Gracias por abrir mi corazón! ¡Gracias por el maravilloso regalo del hoy! ¡Gracias por el maravilloso regalo de mi vida!